Esto es una pequeña muestra de los cientos de trabajos expuestos en la bienal de San Juan de Luz.
Voy a poner una crónica resumida de lo que fue el día.
Salimos de Pamplona con tiempo muy nublado, según nos acercábamos a la frontera el panorama estaba cada vez más oscuro, no nos importaba demasiado porque íbamos preparadas de paraguas y diversas prendas para el agua y también para el frío, pero en cuanto pisamos tierras galas nos cayó una buena borrasca ¡vaya recibimiento! después se portó mejor el día, y ya no llovió casi nada.
Comenzamos a disfrutar de las numerosas exposiciones que estaban repartidas por toda la ciudad, y si una era bonita la otra lo era más, ¡que cantidad de trabajos! ¡y que diversidad de técnicas! en alguna sala pudimos hablar con las autoras que estaban allí presentes.
Hicimos una paradita para reponer fuerzas y continuamos las visitas que nos faltaban, dejamos para lo último los puestos y ya bastante cansaditas nos dedicamos a mirar y remirar las novedades y materiales que tenían que eran muy tentadores pero cómo todo lo que nos gustaba no podíamos comprarlo, seleccionamos y con algunas telas preciosas, revistas y algún que otro capricho más nos dimos por satisfechas de haber disfrutado de lo lindo, esperando volver dentro de dos años.